domingo, septiembre 7

El Problema

Soy una princesa moderna que ha besado mil veces pero no ha dado su beso de verdadero amor ni su B.A.V; es ahora cuando ustedes se dan cuenta mi uso de doble sentido porque existen ciertas cosas que las princesas no decimos.
Mi amor imposible fue denominado príncipe por un hecho muy simple, me hizo sentir algo que nadie lo había echo jamás.
Cenicienta creía que el amor se podía reconocer al tocar su mano, esto me hace pensar que podríamos decir que existe el amor a primer toque (love at first touch), entonces mi teoría no se aleja de las princesas.
Muchos hombres te acarician íntimamente las manos, la cara, los senos, tus partes con la suavidad y precisión para que sientas algo que te deje llevar. En mi caso Si hubieron quienes lo intentaron de muchas formas pero nunca lo lograron, nunca me demostraron que merecían mi amor, mi ser, mi B.A.V porque no era la persona ni el momento ideal.
Pero mi príncipe con un beso me hizo volar, con su mano en mi mejilla toque las estrella y regrese, su beso fue algo totalmente sensorial que sincronizaba su ritmo cardiaco con el mío, no diferenciaba cual era su cuerpo y cual el mío.
¡Cuantos no lo habían intentado y él con un beso lo logró! No podía creerlo, entendí lo que lo demás habían sentido por primera vez.
Lo acompañe a su cuarto con mucha emoción, brillo en los ojos, cómoda, sin miedo porque a punta de besos y caricias me llevo al cielo. Se había ganado mi B.A.V, el dijo que lo deseaba pero no podía, ese día no.

La nueva era

Las princesas de ahora no son como antes, es más, hay aspectos nuevos que no se consideran de princesas, el mundo ha cambiado y existen la nueva generación de princesas. Nosotras soñamos con nuestro príncipe encantado pero el beso de verdadero amor se ha distorsionado para algunas.

Las princesas antiguas besaban una sola vez y por suerte ese era su verdadero amor, en esta sección tenemos a La cenicienta, Ariel, Aurora y Blanca Nieves. Las otras como bella, Giselle, Pocahontas y Jazmín no son princesas clásicas, son efecto de la globalización o no poseen sangre azul por eso su veintiunico beso no es necesariamente amor real.

Las clásicas princesas desaparecieron, es por esto que no podemos reconocer el beso de verdadero amor, muchos hombres aparentemente buenos se cruzan en nuestro camino, es culpa de ellos que no sepamos reconocer a nuestro príncipe azul.


Los príncipes también han evolucionado al estilo XXI donde algunos no creen que su princesa los espera y no muchas mujeres son castas y puras. Tan confuso se ha vuelto que algunas princesas dan su beso de amor verdadero (“B.A.V.”) al creer profundamente que ese individuo es su príncipe pero el las decepciona; ellas no dejan de ser princesas, solo fueron engañadas por un mentiroso.


Existen tres tipos de hombres:

  • Hombres propiamente dichos
  • Caballeros
  • Príncipes

Las princesas mas saladas son las que confunden al príncipe con un caballero, es lo mas difícil de reconocer y por eso dan su B.A.V; pueden quedarse con el caballero (si es que este no las rechaza) o arriesgarse a que su príncipe (si es que lo encuentra) no le guste la idea que ella diera su B.A.V a otro.

Es difícil ser princesa y fácil ser mujer, los prejuicios y las brujas conspiran contra nosotras.


Nota1: La cenicienta es una princesa antigua/clásica aunque no tenga sangre azul, es porque ella nació en el siglo 17 y su creador fue un conocido personaje de la corte francesa de Luis XIV.

Nota2: De las tres clases de hombres existen subdivisiones pero no quiero hablar de ellas.

Los Tres Días

Pareciera que una bruja me dio esos días de prueba, después de esa noche en que nos conocimos al tercer día debía regresar con los peces y ser “triste y miserable por el resto de mi vida.” Amenos que consiguiera que él me ame.
El primer día me asuste, el segundo desapareció antes de poder hacer algo y en el tercero lo busque pero no lo encontré. He regresado a mi océano sin opción para visitar el suyo.

Mi príncipe

No se con quien me he de casar y vivir felices para siempre, lo que si se es que alguien me ha obsesionado y no puedo dejar de pensar en el; volverlo a ver es imposible hay un océano de distancia, desde Latinoamérica a España. Él era tan dulce, lindo, buen amigo, coqueto que me hizo sentir algo que nadie había logrado.

La primera vez que lo ví resalto en entre todos, me dije que estaba en el paraíso. El también estaba descubriéndolo, era nuestro primer día; la princesa Diana antes de morir me acompañó en ese viaje y nos encontrábamos tomando todos los tragos caribeños que podíamos probar. “Un daikiri de fresa y un chechekapapuka, porfavor” mientras que alguien nos llamaba, una chica quería saber cuales eran los mejores; Ese era su grupo: mujeres, doncellas, princesas, hombres, caballeros, y él, mi príncipe. Socializamos con todos pues ese es un prepósito de un Resort ultra secreto imperial, mejorar las relaciones entre naciones pero ocultando identidad. Nos subimos al carruaje para llevarnos a nuestra suite y al llegar contamos lo maravilloso que estaba el lugar a las doncellas, esa noche salimos.

Obsesiones de una princesa

Soy una princesa de cuentos de hadas viviendo en el mundo real, me identifico con todas las princesas Disney en ciertas etapas de mi vida; la más fuerte de las etapas ha sido el síndrome Ariel donde deseo desesperadamente pertenecer al mundo de mi amor pero existen barreras como por ejemplo un océano de distancia.
La Ariel original del cuento, escrito por Hans Christian Andersen, muere al no conseguir estar a lado de su príncipe; Erick se casa con quien pensó que lo rescato, una oportunista en mi opinión. En la versión de Disney, Ariel vive y consigue a su príncipe. Ambas se obsesionaron con aquel mundo del que no podían pertenecer a menos que utilizaran magia y dieran algo muy valioso.
Sin la existencia de magia ¿Qué debo hacer yo?¿Qué debo sacrificar?¿Mi voz?

El Genesis / Prologo

Esta página fue creada con el único propósito de publicar obsesiones de una princesa; pero en el camino muchas mujeres quisieron formar parte de mis historias, es por esto, que luego de este cuento, siguen muchos mini cuentos que espero que le agraden.


Prologo

El aburrimiento es el peor de los males, yo he encontrado una forma de entretenerme escribiendo weas como diría mi amiga chilena.

Al principio pensé que mis escritos se quedarían en las paginas de mi cuaderno de Marketing y sería enterrada con ellas pero después de leer Yo me he robado tu queso me pareció que incluso yo podía escribir ya que era el peor libro que he leído en mi vida, no decía nada, por ende yo también lo puedo hacer.

Mi primer cuento medio larguito se llama obsesiones de una princesa inspirado en dos amigas, una fue mi exprofesora de lenguaje (Solange Rodríguez Pappe) que ha publicado varios libros, la otra se comporta y habla como una princesa (a su estilo); para comprender mi cuento debes saber sobre las princesas del imperio Disney, más aun debes saber sobre la sirenita o por lo menos verte la película.

Yo soy Víctor Frankenstein y están a punto de conocer a mi criatura, voy a martirizar al mundo con mi creación


Índice: